La madre de Julia muere contaminada en la fábrica para la que trabajaba. Julia escapa hacia Buenos Aires perseguida por unos matones que quieren frenar su deseo de justicia. Concepción, madre superiora de un convento decide hacerla por novicia (Esperanza), ocultar su identidad y protegerla. El Padre Tomás establece un vínculo especial con Esperanza. Se enamoran y viven un romance prohibido.